La odontóloga explica que puede darse tanto de día como de noche y afecta a gran parte de la población: “Es un hábito que puede ser consciente o inconsciente y consiste en rechinar, apretar y golpear las piezas dentales en forma no funcional, o sea que estos movimientos no tienen que ver con satisfacer una necesidad como la de masticar para triturar los alimentos”.
“Si tenemos que nombrar las causas, hay que tener en cuenta muchos factores. Para empezar puede darse tanto en niños como en adultos, además podemos encontrar dos tipos de factores causales: entre los factores fisiológicos, están las deficiencias en la nutrición respecto al calcio o alguna vitamina, afecciones gastrointestinales como los parásitos o en algunos casos alteraciones en la presión arterial” señaló.
Asimismo, Quintana expresó que “los factores que predominan en esta época son los factores psicológicos, en este caso el bruxismo se ve asociado a situaciones emocionales del paciente que pueden derivar en mayor tensión a nivel muscular para liberar estrés”.
Agregó que “es saludable que la persona exprese lo que le pasa de alguna forma, el problema es que puede dañar gravemente sus piezas dentales si se produce una continuidad del hábito y no concurre a la consulta”.
Las consecuencias más importantes del bruxismo son el desgaste de las piezas dentarias, inflamación del área, dolor de cabeza y oídos, alteraciones de la articulación tempero-mandibular, que afectan a su vez otros órganos y funciones de nuestro cuerpo y en el peor de los casos encontramos fracturas dentarias.
Para finalizar, los tratamientos para este hábito y sus consecuencias son diversos de acuerdo a la etiología del bruxismo. No hay una cura definitiva y lo más importante es tener en cuenta que la consulta periódica al odontólogo es muy importante.
Los dientes, una vez cambiados por los de leche, son partes de nuestro cuerpo que no son reemplazables de forma natural y siempre es mejor hacer un tratamiento de auto relajación o con una férula para proteger la mandíbula que tener que cambiar una pieza dentaria.