La dislipemia es la alteración en los niveles de lípidos (grasas) en sangre, fundamentalmente colesterol y triglicéridos.
El exceso de colesterol en sangre produce la acumulación del mismo dentro de las arterias, fenómeno que se conoce con el nombre de placa. Esto hará que las arterias disminuyan su calibre y endurezcan, comprometiendo la llegada de oxigeno y nutrientes al órgano al cual irrigan, (corazón, cerebro, miembros inferiores), con la consecuente afectación del mismo.
Está demostrado que la combinación de niveles elevados de colesterol con otros factores de riesgo cardiovascular (Tabaquismo, Hipertensión Arterial, Diabetes) aumenta notablemente el riesgo de daño arterial y por ende el riesgo cardiovascular global (posibilidad de sufrir un ataque cardiaco o cerebral).
Comer saludablemente y realizar actividad física en forma regular han demostrado bajar el nivel de colesterol en sangre. La toma de medicamentos para disminuirlo dependerá, no sólo del valor total en sangre, sino fundamentalmente de la sumatoria de factores que aumenten el riesgo cardiovascular global.
Para prevenir y tratar la Dislipemia se recomienda:
• Distribuir los alimentos en 4 comidas principales y 2 colaciones
• Moderar el tamaño de las porciones
• Reducir el consumo de alimentos con un contenido alto de grasas saturadas, azúcar y sal.
• Consumir por día 2 frutas y 3 porciones de verduras de todo tipo y color
• Incorporar legumbres, cereales integrales, semillas y frutas secas.
• limitar el consumo de alcohol.
• Sumar al menos 30 minutos diarios de actividad física
El sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa en el organismo que puede ser perjudicial para la salud.
¿Cómo se detecta?
El índice de masa corporal (IMC) es un indicador simple de la relación entre el peso y la talla (altura) que se utiliza frecuentemente para identificar el sobrepeso y la obesidad en los adultos. Se calcula dividiendo el peso de una persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m2). Por ejemplo una persona que pesa 60 kg y mide 1,60 m de estatura tiene un IMC=23.4 (60/1.60 = 60/2.56= 23.4).
Según la Organización Mundial de la Salud:
• Un IMC igual o superior a 25 determina sobrepeso.
• Un IMC igual o superior a 30 determina obesidad.
Pero además del peso importa el lugar donde se acumula la grasa. En el hombre es más frecuente su distribución abdominal y en la mujer a nivel de la cadera.
La distribución abdominal de la grasa se asocia a aumento del riesgo de enfermedades cardivasculares, diabetes e hipertensión arterial y se evalúa a través de la medición del perímetro de cintura. Se considera de riesgo un perímetro de cintura superior a 88 cm en la mujer y 102 cm en el varón.
¿Qué causa el sobrepeso y la obesidad?
La causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es una alteración del balance de energía entre las calorías consumidas y gastadas. En el mundo, se ha producido: un aumento en la ingesta de alimentos híper calóricos que son ricos en grasa, sal y azúcares simples pero pobres en fibra, vitaminas, minerales y otros nutrientes, y paralelamente, una disminución de la actividad física como resultado de la naturaleza cada vez más sedentaria de muchas formas de trabajo, de los nuevos modos de desplazamiento y de una creciente urbanización.
¿Cuáles son las consecuencias comunes del sobrepeso y la obesidad para la salud?
La obesidad es un importante factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades no transmisibles como:
• Enfermedades cardiovasculares (principalmente cardiopatía y accidente cerebrovascular)
• Diabetes Mellitus
• Artrosis
• Algunos tipos de cáncer (cuerpo del útero, mama y colon).
¿Cómo pueden tratarse el sobrepeso y la obesidad?
La prevención y control del sobrepeso, la obesidad y sus enfermedades asociadas, requiere de intervenciones poblacionales y a nivel individual. El Ministerio de Salud de la Nación lleva adelante, a través del Plan Argentina Saludable, una estrategia para la prevención y control de los factores de riesgo y determinantes sociales de estas enfermedades en la población general.
La misma se compone de tres líneas de acción:
• La promoción de estilos de vida saludables
• Regulación de la oferta de productos y servicios. Por ejemplo: reducción de la sal del pan, reducción del contenido de grasas malas (grasas trans) en los alimentos que producen las industrias.
• Promoción de entornos saludables para apoyar a las personas en el proceso de realizar elecciones, de modo que la opción más sencilla sea la más saludable en materia de alimentos, actividad física periódica y exposición al humo de tabaco.
Por otro lado en el plano individual, las personas pueden:
• Limitar la ingesta energética.
• Distribuir los alimentos en 4 comidas principales y 2 colaciones
• Moderar el tamaño de las porciones
• Consumir por día 5 porciones de frutas y verduras
• Incorporar legumbres, cereales integrales, semillas y frutas secas.
• Limitar el consumo de azúcar y alcohol.
• Sumar al menos 30 minutos diarios de actividad física